30 Jul Centro especial de empleo: mejorar y optimizar las tareas de una empresa
La empresa como una comunidad
Una empresa puede ser entendida como un conjunto de personas que buscan un determinado fin común. Esta definición, que puede ser muy general, nos permite entender que muchas de las dificultades que enfrentan las empresas derivan de una deficiente cohesión entre sus miembros, problemas que pueden ser de comunicación, trato o de perspectivas de funciones y metas a lograr. Trabajar en equipo no es fácil y para ello la realización de dinámicas y encuentros que potencien las relaciones interpersonales de los empleados tendrá de seguro un impacto positivo en la productividad de una empresa.El ambiente es importante
Para mejorar y optimizar las tareas de una empresa no solo basta con cuidar la comunicación y el trato entre las personas; es además necesario que el ambiente de trabajo sea agradable, funcional y que brinde al personal un clima de optimismo, tranquilidad y seguridad. Está ya demostrado por innumerables estudios que las condiciones del espacio de trabajo inciden en la productividad de una empresa. Por ello, desde simples cambios en la decoración y el color hasta transformaciones en el mobiliario y en la disposición que faciliten la movilidad y brinde luz natural y una temperatura adecuada, resultan en mejoras que darán resultados inmediatos en la actitud de las personas.Revisar los procesos
Comunicación y ambientes adecuados son solo un paso para alcanzar una empresa óptima. Hay además que revisar procesos para agilizar trámites y aminorar gastos de dinero y tiempo superfluos que no ayudan a alcanzar las metas. Para ello, una revisión profunda de las prácticas internas, revisión en la cual deben involucrarse todos los miembros de la empresa, mejorarán y optimizarán enormemente el trabajo. Estos tres ámbitos que hemos señalado, el de las personas, el de los espacios y el de los procedimientos son los núcleos que hay que revisar para una empresa eficiente y eficaz.
Una empresa puede ser entendida como un conjunto de personas que buscan un determinado fin común. Esta definición, que puede ser muy general, nos permite entender que muchas de las dificultades que enfrentan las empresas derivan de una deficiente cohesión entre sus miembros, problemas que pueden ser de comunicación, trato o de perspectivas de funciones y metas a lograr. Trabajar en equipo no es fácil y para ello la realización de dinámicas y encuentros que potencien las relaciones interpersonales de los empleados tendrá de seguro un impacto positivo en la productividad de una empresa.El ambiente es importante
Para mejorar y optimizar las tareas de una empresa no solo basta con cuidar la comunicación y el trato entre las personas; es además necesario que el ambiente de trabajo sea agradable, funcional y que brinde al personal un clima de optimismo, tranquilidad y seguridad. Está ya demostrado por innumerables estudios que las condiciones del espacio de trabajo inciden en la productividad de una empresa. Por ello, desde simples cambios en la decoración y el color hasta transformaciones en el mobiliario y en la disposición que faciliten la movilidad y brinde luz natural y una temperatura adecuada, resultan en mejoras que darán resultados inmediatos en la actitud de las personas.Revisar los procesos
Comunicación y ambientes adecuados son solo un paso para alcanzar una empresa óptima. Hay además que revisar procesos para agilizar trámites y aminorar gastos de dinero y tiempo superfluos que no ayudan a alcanzar las metas. Para ello, una revisión profunda de las prácticas internas, revisión en la cual deben involucrarse todos los miembros de la empresa, mejorarán y optimizarán enormemente el trabajo. Estos tres ámbitos que hemos señalado, el de las personas, el de los espacios y el de los procedimientos son los núcleos que hay que revisar para una empresa eficiente y eficaz.