Centro especial de empleo : Empleo ordinario y empleo en entorno protegido.

El empleo protegido es la forma de empleo a través de la cual las personas con discapacidad entran a trabajar en empresas dispuestas a contribuir con su inserción en el mercado laboral tradicional. El empleo protegido puede ser promovido tanto por el sector público como por el privado, sin embargo, en casi todos los países los gobiernos destinan importantes recursos económicos bajo la figura de subvenciones para apoyar a las empresas comprometidas con el empleo protegido; recursos, que en muchos casos, permiten el mantenimiento de esos puestos de trabajo.En España las empresas generadoras de empleo protegido se denominan Centros Especiales de Empleo (CEE), cuya plantilla debe estar conformada por al menos un 70% de trabajadores con un 33% de limitación o discapacidad como mínimo. Los Centros Especiales de Empleo (CEE) son una figura derivada de la Ley General de Discapacidad (LGD) destinada a favorecer y garantizar la incorporación laboral de personas con algún tipo de discapacidad.

En esencia, el empleo protegido posee las mismas características de un empleo ordinario, la distinción radica en que las empresas que generan empleo protegido ponen a disposición de las personas con discapacidad un especial soporte y ayuda relacionada con el desarrollo de habilidades técnicas (asociadas al puesto de trabajo) así como habilidades de tipo personal y relacional, capacitándolas para realizar un trabajo productivo acorde con sus limitaciones y fortalezas, y por el que perciban una remuneración.

Los Centros Especiales de Empleo (CEE) constituyen una plataforma inicial de desarrollo personal y profesional para los trabajadores con discapacidad, cuya pretensión final es la inserción de estos trabajadores en empresas ordinarias de modo que en estas puedan desempeñar cargos regulares que les permitan continuar desarrollándose tanto personal, profesional como económicamente.