31 Ago Personal con discapacidad para empresas y pymes
La integración de personal con discapacidad en el mercado laboral se ha convertido en un tema de gran importancia no solo para las personas afectadas, sino para el gobierno y los dueños de empresas, al darse cuenta del enorme potencial humano que se desperdicia al prescindir selectivamente de los discapacitados debido a una serie de creencias poco fundamentadas y complicados trámites legales.
Sin embargo, actualmente existe un cambio de paradigmas (tanto legales como sociales), que permiten la inclusión de personal con discapacidad en las pequeñas y medianas empresas. Esto debido a la evidente calidad apreciada en el trabajo de estas personas, que muchas veces supera con creces al promedio de rendimiento de los otros trabajadores. Además, particularmente en las pequeñas empresas, la contratación aporta una gran perspectiva solidaria que se materializa en una evidente aprobación en las pequeñas comunidades, lo cual se traduce en más captación de clientes y rendimiento comercial.
También existen diversas organizaciones especializadas en la temática que facilitan el proceso de contratación, haciendo mucho más amenos los trámites. En el ámbito legal se valoran estos aspectos gracias a la existencia de la LISMI (Ley de Integración Social del Minusválido), que obliga a todas las empresas que posean más de 50 empleados a contar con por lo menos un 2% de personal con discapacidad en su plantilla laboral.
A pesar de existir tantas ventajas, es importante tener en cuenta que el mejor provecho que obtendrá la pequeña y mediana empresa de la contratación de este personal es su impresionante calidad humana y laboral, con una eficiencia, eficacia y capacidad digna de admirar, y que muchas veces supera al promedio.